Este es el cuarto Chakra de los siete Chakras Mayores.
Su nombre en sánscrito en Anahata. Su traducción sería El Invulnerable o El no Afectable.
Este cuarto Chakra se localiza en el centro del tórax, a la altura de los pezones.
Las zonas corporales con correspondencia son los pechos, la caja torácita en general, las manos y la boca.
Presenta una correspondencia directa con el órgano del corazón y los pulmones.
A través de este Chakras se activa el sentido del tacto fino, para lo cual en la mayoría de los casos existen terminaciones nerviosas.
Este Chakra no se encuentra hermanado con ningún otro Chakra y aún formando un todo con los otros Chakras, es "independiente" ya que el Chakra Corazón es el encargado de separar los 3 Chakras Físicos (Base, Sacro y Plexo Solar) de los 3 Chakras Espirituales (Garganta, 3er Ojo y Corona). Es decir, separa el mundo físico del espiritual.
El color del Chakra es el verde esmeralda intenso y el color rosa, colores que también lo estimulan. El verde está más relacionado con la entrega activa del Amor y el rosa al Amor Propìo, el Perdón y la Compasión.
El Chakra Corazón trabaja en el plano del Tú y Yo (del nosotros).
El tema energético de este Chakra es la resonancia en todos los sentidos, como la empatía.
Siempre que nos apartamos de nuestro camino y tenemos un problema grave, nuestro Chakra Corazón se desequilibra.
Este Chakra es el principal indicador de cuándo debemos trabajar con nosotros mismos y de cuál es el momento de pasar de la consolidación, de lo conseguido, a un proceso de crecimiento, con el fin de transformarnos.
En combinación con otros Chakras, el Chakra Corazón nos ayuda a distintos niveles a conseguir una sintonía con lo Divino.
Junto con el Chakra Corona ponemos en sintonía nuestra voluntad con Dios.
En el caso del Chakra Corazón, todo gira alrededor del Amor y es también el asiento del Amor personal y humano.
Los temas principales de este Chakra son el amor a un@ mism@, pero también la capacidad de amar a otras personas, es decir, el Amor al prójimo y la Compasión.
También es el centro principal del mundo de los sentimientos más profundos.
Los traumas que habitualmente podemos encontrar a este nivel son heridas emocionales de cualquier tipo, desengaños, traiciones, rechazos, pérdidas, duelos no resueltos y poca entrega emocional con amor, entre otros.
